| Choque de reyes es la segunda parte de la serie Canción 
              de Hielo y Fuego. Así dicho parece ser un libro más, 
              una continuación más de una serie de fantasía 
              con más o menos aciertos; pero no es así: este libro 
              se ha convertido en uno de los más esperados y deseados de 
              los últimos tiempos gracias a que su predecesor en la serie, Juego de Tronos llegó 
              a ser un nuevo referente en la literatura fantástica actual. Este segundo volumen no lacanza el mismo nivel que el primero, 
              pero poco le falta. Martin nos continúa sumergiendo en la 
              épica historia de los siete reinos de Poniente, unos reinos 
              que como indica la contraportada se están desangrando entre 
              ellos después de la caida del rei regente, Robert. Hasta 
              cinco reyes reclaman el territorio o parte de este, cinco reyes 
              que se unirán, se traicionarán, se vengarán 
              y en definitiva lucharán y haran lo que haga falta para gobernar 
              el continente. Pero en este segundo volumen le hemos de añadir un hecho 
              muy especial que en Juego 
                de tronos solo se dejaba entrever: La magia está volviendo. 
              Continuamos teniendo un argumento narrado bajo la perspectiva de 
              la fantasía realista (sin magia, sin seres mitológicos) 
              pero a medida que avanzamos en su lectura comprobamos que eso no 
              es del todo cierto y que el elemento sobrenatural empieza a tomar 
              parte en los asuntos de las gentes de Poniente. Martin continúa utilizando un lenguaje vivo, con muchos 
              diálogos (los de Tyrion impagables), con poca acción 
              pero mucho suspense, continúa proporcionándonos leves 
              pistas que creemos que nos ayudan a entender el intríngulis 
              general pero el autor no tiene compasión... Cuando menos 
              te los esperas ya nos ha hecho un giro argumental, o nos ha dejado 
              con la boca abierta al final de un capítulo (los famosos clifhangers). Sí, la adicción está asegurada 
              pero repito que no tanto como en el volumen anterior. En Choque de reyes encontramos a personajes a los que casi 
              no les ocurre nada destacable (Daenerys, Jon...), de los que nos 
              habíamos formado muchas espectativas en el anterior volumen; 
              en cambio otros regogen todo el protagonismo (Tyrion, Arya...), 
              cosa que descompensa ligéramente aquel equilibrio entre personajes. 
              Naturalmente se añaden personajes nuevos y se "despiertan" 
              a otros: El caso más flagante es el de Theon y Stannis que 
              en el primer libro solo eran mencionados y aquí tienen un 
              papel importante. Lo que está realmente claro, pues, es que el autor tiene 
              un argumento pensado para muchos tomos, un argumento cerrado, redondo, 
              donde personajes que simplemente se nos presentan en un volumen 
              toman protagonismo en otro, donde un hecho narrado en un capítulo 
              de Juego de Tronos repercute 
              directamente en otros de por ejemplo Tormenta de espadas y donde en definitiva el autor está creando una obra de tal 
              magnitud que marea, con tantos personajes que necesitas el apéndice 
              del final para estar centrado y donde el rol de estos está 
              tan bien tratado que no te puedes posicionar en ningun bando, salvo 
              casos especiales. Todo el mundo es "bueno" a su manera 
              y "malo" según como se mire.
 Un hecho que me gustaría destacar es que Martin se preocupa 
              de que su narración resulte creíble. Se interesa en 
              mostrarnos la logística de un ejército, como funciona 
              por dentro, las motivaciones que tienen los soldados, etc, etc... 
              Tiene una predisposición total a enseñarnos los hechos 
              más detallados de como se realizarían las guerras 
              en Poniente. Y eso tiene un valor añadido importantísimo 
              ya que nos hace vivir más aún la aventura.
 Resumiendo, una continuación más que digna del ya 
              mítico Juego de tronos, 
              que sigue con los Clichés habituales pero que en algún 
              pequeño tramo te hace pensar que el autor está escribiendo 
              alguna página de más. Claro que este es solo el segundo 
              volumen de una serie de seis y de hecho realiza más el papel 
              de nexo de unión entre Juego 
                de tronos y el siguiente volumen de la serie: Tormenta 
                  de espadas. Parece que se nos prepare para lo que va a venir, 
              de forma que la espera a ver publicado Tormenta 
              de espadas será dura, pero esperemos que no larga.   |  |