Ray Bradbury es un escritor muy prolífico
y también de los más conocidos por los lectores de
ciencia ficción. Ha publicado algunas obras clásicas
que no pasan de moda (Crónicas
marcianas, Fahrenheit 451)
y ha demostrado su talento como narrador de cuentos.
El signo del gato es una antología que
me regaló mi pareja por Sant Jordi (entre otros libros) porque
siempre que se queda bloqueada buscando un libro de Ciencia Ficción
para obsequiarme, me acaba regalando un Bradbury. -"Y así
lo acierto seguro", me dice. Pero esta vez por desgracia no
ha sido así, y esta recopilación no es ni mucho menos
lo que me esperaba.
Esta antología ecléctica muestra
muchos temas diferentes aunque sólo 4 o 5 de los cuentos
tienen algo a ver con la ciencia ficción o la fantasía.
No es que esto sea un problema (cómo es normal leo de todo)
pero la verdad es que los de esta temática no destacan demasiado,
excepto quizás Cuestion de gustos (en el que me siento
plenamente identificado por cierto). La cuestión es que la
mayoría de los cuentos no están a un nivel lo suficiente
interesante como por recomendarlos. Si exceptuamos algunos de ellos
como Muerte de un hombre precavido (Un relato duro y directo
sobre el terror a la muerte, implícita en el título),
el mencionado Cuestión de gustos, la relación
imposible entre los humanos y unos extraterrestres de forma arácnida
o otros de temática más costumbrista (La Casa)
o de denuncia racial (La Transformación), la verdad
es que la antología no llega al aprobado.
Un hecho curioso es que los cuentos pertenecen
a toda la carrera literaria de Bradbury, desde alguna repesca de
sus primeros tiempos hasta los últimos escritos hace unos
años. Curiosamente, de estos últimos sólo uno
llega al aprobado, mientras que los cuentos majores son de finales
de los años 40 y comienzos de los 50. ¿Será
que el bueno de Ray Bradbury está perdiendo facultades? ¿O
quizás es simplemente que la tria de cuentos no es la mejor
que se podría ofrecer?
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