Cuatro son los cuentos que integran este decimoquinto número de la revista Catarsi. Tres cuentos de origen extranjero y uno de autóctono. Tres cuentos de ciencia ficción y uno de fantasía. Quizá estos datos evidencian un poco el talante, la dirección que toma la revista. Creo que este núm. 15 es un paradigma de lo que hemos encontrado hasta ahora.

El primer relato es un cuento corto de Sylvia Spruck Wrigley titulado "El front” .Una historia me atrevería a decir que antibelicista todo pese al impresionante monólogo que se le hace a un soldado raso para que ocupe su posición y se prepare para morir si es necesario, ante un extraño caso de invasión alienígena que parece destruirlo todo a su paso. Es un cuento directo y sin ambigüedades que tanto podría servir como metáfora sobre cualquier guerra actual o como aviso sobre los sacrificios que hay que hacer para un bien mayor. Correcto.

"L’apocalipsi segons Sant Joan” de menut es un trabajo bastante original que combina historia y viajes en el tiempo y que tiene un final digno. Pero la palabra apocalipsis en manos de menut no se puede tomar más como una broma. Y realmente el relato, centrado en la búsqueda desafortunada de un viajero temporal que investiga para una misteriosa secta llamada La Orden de las profecías, es un batacazo emocional en algunos de los hechos más miserables de la historia de la Tierra (Guerras, hambre. ..). Pero como casi siempre en los relatos de menut, el ritmo lo encuentro descompensado de forma bastante evidente. Tenemos unos primeros capítulos introductorios donde el autor se recrea describiendo de forma más pausada y elegante lo que está por venir para a continuación dedica buena parte del relato a ahogarse en una tormenta de acción y inputs impresionantes para mostrarnos la barbarie humana durante la I Guerra Mundial y también bajo el intenso y absurdo gobierno de Mao en China. Son estos capítulos largos y trabajados donde menut pretende avisarnos de hasta dónde es capaz el hombre en su autodestrucción. Pero entonces, vuelve a cambiar el ritmo y nos ofrece un final, que si bien, está bien resuelto, lo encuentro precipitado y faltado de la empatía de los últimos capítulos. Es como si el autor hubiera agotado la energía en los capítulos centrales y hubiera escrito a toda prisa la consecución del relato.

"L’ecologia del món de les fades" de David D. Levine es el relato que me ha parecido más bien trabajado literariamente (probablemente la traducción de María Lucchetti haya ayudado). No es ni mucho menos una historia original ni rompedora. Es un acercamiento a la magia feérica que podemos encontrar en muchas culturas pero está escrito con carácter y tiene un desarrollo que te va llenando de buena literatura. Me ha atraído pues, más por el como que por el contenido de la historia: Una búsqueda por parte de una chica de una cura mágica para la enfermedad de su madre. Notable.

Y sí este último cuento no destacaba por su originalidad, sí lo hace en cambio "Saturn en sol menor" de Stephen Kotowych. Se trata de una historia de ciencia ficción que se aleja de los argumentos clásicos para querer otorgar un punto diferente, una nota discordante, y presentarnos un cuento con sentido de la maravilla incluido. Aquí, la lectura me ha parecido simplemente correcta, pero en cambio el contenido lo he encontrado de lo más estimulante. Quizás por la magnitud y sencillez de la premisa: Un estudiante viaja a una nave en órbita el planeta Saturno para entrevistarse con un reconocidísimo compositor que se ha retirado – parece- a este remoto lugar del espacio. El encuentro entre los dos protagonistas podría haber sido resuelto con más interés pero poco a poco observamos como el autor se centra en lo que quiere mostrar a través de este sencillo cuento: Sentimientos universales expresados ​​a través del sentido de la maravilla que nos permite la ciencia ficción. Muy bien.

Una Catarsis 15 pues, bastante interesante y que vale la pena leer.

Eloi Puig, 16/08/15