Hace unos meses se publicó el quinto número de la revista Catarsi, que tras el número especial dedicado al autor José Antonio Cotrina, vuelve a la normalidad ofreciendo relatos tanto de autores autóctonos, como traducciones - en este caso del español-

Este es un número muy ecléctico, con cuentos ciertamente muy buenos -los mejores provienen del otro lado del Atlántico- y otros bastante flojos. Una recopilación que evidencia una vez más que el jurado encargado de elegir los relatos de la revista tiene gustos de todo tipo. El Catarsi 5 incluye historias de ciencia ficción, fantasía y terror, los tres pilares del fantástico. Está ilustrado por Mònica Carrión, Marc Castellón y el incombustible Gerard Tauste.

Para empezar, un plato suculento: "Las celebracions de la fi del món" (Paolo Dobrinin, de Uruguay), una obra surrealista, bien escrita y que no busca ninguna moraleja o final impresionante, simplemente se deja ir y eso provoca que encuentre resonancia en el lector si éste está dispuesto a simplemente disfrutar de la literatura. Una trama que evoca imágenes fantásticas y que no pretende guiarnos por un camino, si no mostrarnos una fotografía de un escenario donde la imaginación del autor cuaja perfectamente en unas líneas, a veces poéticas, a veces rozando lo absurdo. Muy estimulante.

Le sigue el plato fuerte del libro: "Beneïda" del argentino Néstor Darío, sin duda el mejor relato de la revista. El autor nos presenta de forma cuidadosa y con mano inspirada las memorias de una anciana que ha visto pasar los últimos siglos de la vida en la Tierra. El porqué es un misterio que al final se nos desvela y que nos abre la mente a estratos de carácter metafísico. Muy bien narrada, es una historia sensible pero que huye de la lágrima fácil. Muy buena.

Silvia Romero nos habla en su artículo "¿Què és l’Associació de relataires en Català?" sobre dicha asociación que en poco tiempo ha tenido una buena acogida entre los aficionados a la literatura en catalán. La ARC última varios proyectos para promover los relatos en catalán, entre ellos la colaboración con la revista Catarsi sobre relatos fantásticos que dará lugar a un número especial el próximo año. Las bases del concurso se pueden consultar en www.catarsi.cat

Volvamos a los relatos. Enrique Díaz me sorprendió muy gratamente cuando se publicó su cuento "Si de cas vols volar" publicado en el Catarsi 2. Una historia que llegó a la final de los pasados Premios Ictineu - era mi favorita para ganar-. Por eso después de leer el relato corto "El millor amic" la pequeña euforia por volver a saborear a Díaz se ha visto oscurecida por un cuento muy banal, sin demasiado interés sobre la relación entre un perro y su amo y al que no le acabo de encontrar el elemento fantástico todavía. Díaz es capaz de mucho más y espero volver a encontrarlo por estas páginas con propuestas más interesantes.

Guim Valls nos sorprende con su "Horror vacui", no por el final inesperado, si no por ofrecernos la prosa más elegante y elaborada de esta antología. El cuento resulta ser un claro homenaje a Lovecraft. Quizás es el cuento más elaborado del Catarsi 5 pero le falta un poco de dosis de terror o intriga. También resulta un poco largo pero el talento del autor y su prosa equilibran este handicap. La trama gira en torno a la búsqueda del mítico libro Necronomicón, el cual es la meta que muchos eruditos persiguen, entre ellos nuestros protagonistas que viajarán a Arkham -Nueva Inglaterra- para poder estudiarlo. Una narración que, como decía, tiene un final sorprendente y que por un primer momento puede parecer vacío y sin gracia pero si uno recapacita sobre la figura de Lovecraft le encuentra un sentido. Muy bien.

Finalmente encontramos a Patricia Muñiz, que también pudimos leer en el Catarsi 2 con "Megapíxel glass" que presenta "La missión de la Marlene" el que da lugar a la fantástica portada de la revista, ilustrada por Mónica Carrión. Por desgracia el cuento no se encuentra a la altura de la portada. Es un relato sobre el rescate de unas crías de oso por parte de Marlene, una osa salvaje que apenas está saliendo de la hibernación. El problema es que el relato no tiene tensión ni ofrece empatía con el personaje. La trama resulta curiosa por el hecho de una aparición fantástica en el mundo animal y no en el humano, como estaríamos acostumbrados, pero la falta de un argumento atrayente hace que el lector no empatice con lo que pasa. Flojito.

Un número pues, con altibajos, pero también con algunas sorpresas más que agradables. El sexto número aparecerá en menos de dos meses.

Eloi Puig, 28/09/11